El Mundial de Fútbol Alemania 2006 fue una fiesta del deporte que reunió a 32 selecciones entre el 9 de junio y el 9 de julio, y que tuvo como escenario un país con gran tradición futbolística. Alemania organizó un torneo impecable, con estadios repletos, un ambiente vibrante y partidos que quedaron para la historia. Desde el inicio, el torneo mostró su intensidad con equipos tradicionales y otros menos esperados brindando grandes sorpresas. Ecuador, Ghana y Australia sorprendieron al avanzar a octavos de final, mientras que selecciones como República Checa y Croacia no lograron cumplir las expectativas.
A medida que avanzaban las rondas eliminatorias, comenzaron a brillar las grandes figuras. Francia, liderada por un renacido Zinedine Zidane, dejó fuera al vigente campeón Brasil en cuartos de final con una actuación inolvidable. Italia, por su parte, mostró un fútbol equilibrado, con una defensa férrea y ataques contundentes, destacando jugadores como Cannavaro, Pirlo y Buffon. Alemania, empujada por su gente y con un joven Miroslav Klose como goleador, fue eliminada por Italia en semifinales, en un partido épico que se definió en la prórroga con goles de Grosso y Del Piero. En la otra semifinal, Francia venció por la mínima a Portugal, con un penal de Zidane, alcanzando así una nueva final mundialista.